29.12.05

Moonwalking

Broken Drum del disco Guero de Beck (*) , es el soundtrack elegido para terminar de armar mi caja, cerrar mis backups, mandar correos a mis ejecutivos del banco, del seguro, de tiendas, suscripciones y demás... Y empezar a cerrar mi boliche en BBDO. Un espacio que cierro por voluntad propia pero que sé que voy a echar de menos.
¿O ni tanto? Eso es lo que estoy pensando en este momento. Qué echo de menos en realidad. Que voy a perder. Porque por trabajo, la típica cancioncita de "uuuh, te vuelves a McCann, estás seguro?" No me va ni me viene. McCann tiene una imagen de agencia poco creativa sustentada por años que, pese a todo lo que está pasando -gente nueva, buenas cuentas, ganas de hacer las cosas mejor- un grupete del mercado mantiene. Injusto. Y tonto. Primero, porque ,que yo recuerde, la mayoría de mis premios vienen de ahí. Y segundo, porque soy un convencido que hacer cosas buenas no pasa por la agencia. Pasa por el creativo que las hace. It`s a fact. Prefiero ser de los que apura el paso que ser de los que lo mantienen. En BBDO la imagen ya está ganada. No hay desafío. Pero hacer algo bueno y distinto y conocido en McCann, y ser parte del grupo que les va a dar el bofetòn a todos los que dicen que no pasa nada en McCann... that`s what i`m talking about.
Y por amigos, los voy a seguir teniendo. Los amigos que hice son para largo.
Además, vuelvo a un lugar conociido. Y con puesto mejor. Dos cosas que no me pueden dar acá. Y que no me van a dar acá. Fact.
En fin. Esta noche me hacen la despedida en La Terraza de Ñuñork. Y, pese a todo, aún no me cae del todo el tejazo de dejar esto. Esta so called life que he llevado por casi 2 años. H, Ignacio, la Fran, Boss, Big Boss y toda la manga que hizo mi día por tanto tiempo. Y, claro, está también la vuelta a mi reducto ultra conocido en donde viví por más de 5 años.
Así que la sensación es rara. Es como dar un paso atrás para dar uno hacia adelante. Un moonwalk que ni Michael Jackson se haría.
Pero que se siente bien. Y eso es lo único que me importa.

(*) (Guerolito, el que les comenté a principios de semana, es en realidad el disco de remixes de Guero)

28.12.05

Epilogue

No work. No calls. No news. No blogging. No comments.
No nothing.
El tiempo está detenido en miércoles y no hay forma de empujarlo.
Es mi último miércoles en mi agencia, tengo la caja lista debajo de mi escritorio (la proverbial caja que se sostiene con una mano mientras te despides con la otra) y nisiquiera hay moscas como para verlas pasar. Ya terminé todos los backups y las limpiezas y los papeleos... y nada.
Absolutamente nada.
Estoy trabajando en un proyecto que se va a presentar cuando ya no esté, a gente que no puede saber que me fui ("Está de vacaciones" va a ser la consigna que va a tapar el hecho de irme a trabajar con la competencia), así que comprenderán que el efecto epílogo alargado lo tengo sobre mi cabeza. Perforándome el reloj, que parece que a ratos va para atrás en lugar de adelante.
Así que hoy, cual rito final, gasté mi último cheque restorán con H e Ignacio en el Sushita. Para volver más tarde con los pies de plomo a intentar trabajar en algo que sé que no voy a terminar, leer blogs añejos, hojear noticias sosas y tamborilear mi escritorio con cara de espera.
Y bueh. Por lo pronto, voy a intentar seguir con mi día de ulpo haciendo pitanzas a mi otra agencia (he estado llamando toda la mañana a gente de la agencia susurrando "Queda poquiiiiiito", como en el comercial de Loncoleche; luego cuelgo) y esperando encontrar algún aviso o canción o post interesante en el cybermundo.
Mira que en el mundo real, hoy no pasa nada de nada.

27.12.05

2005 segun mis orejas

Luego de leer el último post de la archi-maestra del periodismo musical nacional Marisol García, (a quien seguí en sus viajes por el mundo, y me dio una agradable sorpresa tiempo después al retomar su abandonado blog), me bajó también por hacer un recuento musical del 2005. Hay harto que escribir porque hubo harto que escuchar, así que avísenme si se me fue algo:

Goldfrapp me gustó harto. Y mucho más cuando la vi en el MTV Europe Awards. Ian Brown y su disco doble refrescaron mis orejas a mediados de año. De pelos. "You`re beautiful" (y el disco entero) de James Blunt, bien. Y el dato de Pablo Larraín, Architecture in Helsinski, simplemente genial. Pero no tanto como Simian ("We are your friends") y su single "La Breeze". Lástima que nunca llegó a Chile. En fin, para qué están los amigos.
Mylo me rayó todo el año, no lo saqué de mi repertorio. Y J.K. con su Jamiroquai me reencantó con su dvd en vivo desde Verona, así que volvió a mi top ten.
Ahora que si hablamos de placeres recientes, esta navidad conocí el grupo Cocoon -un nuevo grupo francés de Chill-out que les comenté de pasada en mi post anterior-. Imperdible para dormir la siesta, bailar o lo que sea que te diga el disco que hagas. Just do it; Pompournac y su último Hotel Costes, wow. Franz Ferdinand, con su rockedad sucia, una sorpresa que no sorprende. Siempre es notable. Beck y su Guerolito, refrescante, para variar. Foo Fighters , best of you, gran video para una gran canción. su disco doble me (dis)gustó mucho. Nothing new.
Y wow, podría seguir chequeando mi Itunes hasta el infinto (Anouk, DJ Food, BajoFondo, Brazilian Girls...) pero mi soundtrack del 2005 queda hasta acá. Les dejo espacio a ustedes. ¿Qué les hizo amar a sus orejas este año?... Comente Shá.

25.12.05

Feliz abstemiedad!

(ó: "Cof Cof Cooooof, feliiiiiz enfermedaaaaad!!")
Este jueves caí en cama con principio de amigdalitis. Y como el doctor me dejó full antibióticos (ni ahí con dar abrazos por teléfono), estuve obligado a pasar una navidad de abstemio.
Y. Qué se le va a hacer.
Pero no se crean que la falta de alcohol destiñó la celebración. Nah. De hecho estuvo bastante buena. Como siempre, la organizamos donde mis tíos franceses, con sus Pere Noel, su full style y el soundtrack a cargo de Cocoon (un grupo francés que se toca un chill out increíble) y Hotel Costes.
Fue una noche de luz tamizada, ceviche peruano, el increíble pavo hecho por mi abuela... y el broche de oro con los postres de la Romi y mi mamá (en esta ocasión, Panna Cota y Suspiro Limeño), que compensaron la falta del ya clásico Bellini navideño.
Luego de los postres, las mariposas en la guata. Las mismas que se me deben haber quedado guardadas en mi niñez; de más, espacio hay harto para perderse ahí dentro.
Siempre me sorprende el asunto de los regalos. La producción; la cantidad. El consumo hecho paquete, antecedido del clásico "vamos a buscar al viejito pascuero" de los niños, que da paso a un blur de cajas de color, crujidos de papel y olor a bicicleta nueva.
Veinte minutos después, apenas y se ve el arbol detrás de los regalos.
Y debo decir que este año me hizo más feliz regalar que recibir regalos. A mi abuela, que vive sola con la nana desde que mi tía abuela murió, le regalé un canario precioso que la dejó con una sonrisa que no se le quitó en toda la noche. ¡Y Sebastián! feliz con cada cosa que le llegó: la bicicleta de Bob Esponja (de parte de mis viejos), el computador, un batman, un flash, una pistola de agua de Los Increíbles… Y no importaba si lo que abría era una polera o un juguete, andaba feliz y gritandole las "graschiash" al viejito pascuero. De hecho aproveché de regalarle una matraca artesanal que vi en el Drugstore y me encantó y pensé que me iba a tirar por la cabeza... pero no. Hasta eso le gustó.
Pechocho mío.
A la Romi le regalé un modelo de Swatch que al golpearlo con el dedo hace que las manecillas den vueltas y busquen un “te quiero mucho” “poquito” o “nada” en francés, para volver luego a marcar la hora. Le encantó. Luego, un freezer (para todos, no se crean mi machismo) y una agenda de Hello Kitty que la dejó con cara de niña de 10 años emocionada.
¿Qué le pasa a las mujeres y Hello Kitty?... Eso está como para un post completo.
En fin. Mientras ayudaba a mi hijo a abrir sus regalos, veía de reojo a mi hermano chico (10 años) abriendo papeles con cara de Gollum. Un energúmeno en cuatro patas que rompía cintas y papeles como si el mundo se fuera a acabar, olfateando su nombre en las tarjetitas y abalanzandose sobre los pobres regalitos con su nombre. Una máquina del consumo. En la otra esquina, el ying de este yang: la Vale, mi hermana de 9, peinando su muñeca nueva (mientras no peine la muñeca de verdad…) y probandose ropa tranquilamente. A un lado, mis tíos intercambiando regalos del estilo… ¿te acuerdas de ese cuadro famoso que te encanta? ¡¡feliz navidad!!... Y agendas Viuton y cajitas Polo y bolsitas Boss.
(Mi cabeza cantaba "Si te sobra un poquito...")
Al otro lado del árbol, mi vieja mirando su celular nuevo casi con el soundtrack de “2001, odisea espacial” de fondo. Mp3, cámara, video… y yo mirando a la Pepa (mi otra hermana, la de 23) preguntándonos si le regalamos un "Cell phones for Dummies" o qué.
Mi mamá es de esos cuasi extintos especimenes que nunca en su vida han tocado un computador. De las que vive del "play" y el "stop" del vhs; que los dvds los ve de lejitos y que recién está aprendiendo a leer mensajes de texto.
Porque de escribir uno, ni hablar.
Anyway; a mí me llegó el anhelado MP3 player, un Tommy Summer, una fondue, algo de ropa y el nuevo Siemens Gigaset que me regaló mi viejo. Un inalámbrico que parece celular –yo tenía el modelo del 2000, que parece cafetera al lado de éste- y al que sólo le falta que te conteste solo y deje recado. Re guay, joderrrr!!!
El domingo (que no puedo creer que no haya sido sábado, porque quiere decir que el 26 se trabaja; altiro, sin anestesia ni prólogo post navidad), la tarde se me licuó entre la piscina de "Il Pappo" de la Romi, los niños salpicando a los perros y los grandes durmiendo siesta.
Osea, un almuerzo a la antigua.
Un buen prólogo para esta navidad abstemia, regalada y celebrada.
Salú.

22.12.05

Happyness

Como bien dije (aunque no hay que ser muy clever como para haberlo visto venir), esta semana todos nuestros colegas bloggers andan en su sacada de cuentas del 2005. Qué hicieron, que les hubiera gustado hacer; qué consiguieron. Felicidades, metas, condoros. Todos están frente a la mesa de luz viendo sus radiografías del ombligo, preguntándose por qué fue que no y por qué dio que sí.
Mientras, mis cuentas sacadas siguen con esa falta de epìlogo que sólo el cambio de agencia me va a dar. Así que, en ese aspecto al menos, dejo pendiente mi personal closure para la primera semana de enero. Cual fin de año chico.
A nivel familiar, también hubo varias movidas. Con la Romi nos pegamos un viaje que nos debíamos hace tiempo; nos reafirmamos como pareja; estamos por tener un segundo hijo y llegamos al comienzo de nuestro 5to. año de matrimonio. Mientras, mi hermana entró a trabajar, se independizó y ya decidió irse a vivir con el pololo (y papá de mi sobrino). Encontré un grupo de muy buenos amigos en muy poco tiempo... Y, claro, si hablamos de cómo fue mi año profesional no puedo quejarme. Un par de premios en Achap, Agencia del Año y el recién decidido retorno a McCann -nuevo cargo incluido- que se oficializará justo al momento de dar el abrazo.
Fue un buen año. No me puedo quejar.
Corroboré que uno es lo que quiere ser. Que la vida, sea esta la única o la primera de una serie o el pre-paraíso o whatever, viene con un significado que tenemos que descubrir. ¿Qué es la felicidad? Sentirse pleno. Algunos lo hacen con un auto del año (luego se darán cuenta de su error); otros, con sus amigos. O su familia. O su trabajo.
Personalmente, logré dar con mi centro. La Vida, en mayúsculas, es un conjunto de pequeñas vidas en las que conviven tu yo profesional, tu yo papá, amigo, pareja... Y sólo conjugandolas bien, y dándote cuenta de que todas forman parte de ti a la vez, podrás sentirte pleno.

Así que a mis amigos, parientes, colegas... A a la Romi, Sebastián y Nicolás... ¡y a la Mopa!
Gracias a todos los que hicieron de este 2005 un año digno de ser recordado con una sonrisa.

Y sí, seguramente voy a postear algo más antes del 2006... pero para mi, este año ya se fue. Y lo cerré y lo enmarqué como para pegarle unas miradas más. Pero ya fue. El positivo le ganó al negativo por goleada.
¿Y saben por qué? Simplemente porque así lo quise.

Esta inquietante pintura post Tomy y Dali llamada
"My Happiness is riding on your misery" es parte de la colección de Luke Chueh

20.12.05

Waiting

Y por mientras, este maldito sentimiento de entretiempo. Luego de tirar la bomba en BBDO –donde todos concordaron conmigo, aunque a la mayoría le dio lata de que me fuera-, esta semana se vino con la misma carga de trabajo, pero con una mirada más de vitrina. Como que estoy acá pero no.
Efecto Fantasma, que le llamo.
Así que hoy fogueè mis penùltimos cheques restorán con la manga (H, Ignacio, la Fran y Carr) en el Ruby, y de ahì pasamos a tomarnos un helado al recién inaugurado Tavelli de Isidora Goyenechea mientras filosofeábamos sobre el medio publicitario. Un must veraniego (el helado, porque filosofar es un must atemporal), ahora que el encargado de la gelatería es un italiano que está haciéndole pelea firme al Fragola y el Bravissimo.
Y se nota. El After Eight y el de mango son absolutamente imperdibles. Probad.
Pero blá. Vuelvo a lo mío. Al dedo que acaba de presionar “eject” y espera que salga el disco. Así me siento. Haciendo backups, pensando de reojo en las cuentas que me vienen (Capel, Mall Plaza, Samsung, Nescafé, etc.) y en las cosas que dejé sin hacer. A nivel de pega, al menos.
Porque para hablar de la vida, se notó el cambio cuando me vine acá. Más vida por los “chiches” anexos –entre los cheques restorán, que te hacen asiduo a las salidas grupales, las salidas temprano los viernes y la vista espectacular que tengo en mi ventanal, las celebradas y tal-, que se resumieron a más amigos y más independencia. Eso me lo gané. Lo tengo. No voy a perder a mis amigos de acá por el cambio. Ahora, además, voy a estar un paso más arriba en mi carrera. Y eso es lo que más me tiene ansioso. Probar qué tan bueno soy para este cargo. Un puesto que, de más está decir, es como el de un Director Creativo Jr. Un pre; la vitrina real para probar y probarme a mí mismo si me gusta o no.
Y de las platas, nada que decir. Se viene mi segundo hijo y se agradece. Pero lo que verdaderamente me llama está a nivel profesional. Seguir haciendo carrera en una agencia con una red global muy firme. Postgrados en el extranjero, dentro de la red; presentaciones en otros países, task forces en Latinoamérica, licitaciones internas…

Se viene el 2006. El año del perro. Qué casualidad, porque los que más fieles me fueron todo este tiempo, son los mismos a los que vuelvo.
Back to basics, back to home.

Hungry ears

Ando con las orejas hambrientas. Hace tiempo que no escucho nada digno de devorar.
Y salir a vitrinear música en época de tumultos navideños, no way.
Así que invoco a vuestros timpanos. ¿Algo nuevo derritiéndose por ahí? ¿Algún ídolo nuevo a quien gritarle?!... Heeelp!...

19.12.05

New year, new life


Se nos acaba el año, y por estos días empezamos a cuadrar la caja. Closures, como le dicen los gringos. Las resoluciones; el qué hicimos, qué logramos y qué vamos a hacer en el año del Perro que se ve venir a la vuelta de la semana.
Personalmente me llegó fuerte esto de las resoluciones de fin de año. Y es que hace unos días me llamaron con una propuesta de cambio de agencia. Un proyecto que se reavivó de la noche a la mañana, justo cuando estaba por tocarme la pera y mirar hacia arriba con cara de pregunta, ante la cantidad de cambios y tambaleos que se ven venir a lo lejos.
Y ha sido duro pensarlo. Costó que la balanza se quedara quieta como para poder mirar desde arriba y dar una respuesta.
¿Estoy donde quiero estar? ¿Puedo seguir subiendo?...
¿Es tiempo de moverme otra vez?
Y la plata tira, pero ni tanto. No es por plata; es por mi carrera. Y el cambio me beneficiaría en los dos aspectos.
Uf.
Justo cuando uno empieza a sacar cuentas por el año que se va, me llega con el mismo vuelo un proyecto que me hace sacar las mismas cuentas, pero sin abrazos ni champañas incluidas. Resoluciones en mayúscula. Resoluciones que, esta vez, me llevan decidirme, luego de largas conversaciones con la Romi, con mis jefes, con mis prospects.
Así que ya lo decidí.
Dejo BBDO.
Y me preparo para subir a Supervisor Creativo en mi ex agencia, empezando el 2006 con un sabor a deja vu que me tiene ansioso por dar vuelta la hoja… y nervioso por una nueva etapa que parte el mismo día en que se nos va el año.
Talking about Closures.

15.12.05

Take me out to the movies

El poco tiempo que he tenido esta semana lo he aprovechado a concho con mi hijo, los lunch con picinazo donde H, algo de Gym, comprar los últimos regalos navideños... Y gastar los botones del control remoto. Así que aprovecho el vuelo y la tranquilidad matutina para mandarles un pantallazo de críticas:
En series, sigo fanático de LOST y 4400. Imperdibles las dos. La primera cuenta la historia de un grupo de gente cuyo avión cae en una isla paradisiaca en medio de la nada. Donde, oh sorpresa, algo extraño pasa. Cada capítulo, además de mostrarnos el desarrollo de los personajes en este medio extraño, nos muestra un raconto de las vidas pasadas de cada uno de ellos. Ya salió el DVD de la temporada 1 (6 dvds, uf), y da para harto más.
Mi otra serie favorita de la temporada es The 4400: 4.400 personas que aparecen un día en un terreno descampado. ¿su conexión? Cada uno de ellos fue abducido en algún momento. Y todos volvieron con algún poder. Hay una niña de los '30`s que vuelve con poderes paranormales; un tipo de los 90's que sana enfermos... Ya va en la mitad de su segunda temporada en AXN -en TVN se viene luego, espero, ya que la primera temporada la ví ahí-, y también le lleva su DVD para ponerse al tanto, así que vaigale y goce.
En películas, ayer vi la –ahora lo sé- inmamable Amityville Horror, que me dejó con susto a poco. Nótese. Mucho efectismo, mucho maquillaje tétrico, pero una mierda al fin y al cabo. Lo que no quitó, claro, que me fuera corriendo de la pieza de estar a la cama cuando la terminé; a las 12 en punto. BuuuUuuuUUUuuu....
La que sí me gustó mucho fue Skeleton Key. Y me pasó al revés, porque pensé que esa sí que era mala y resultó estar muy bien armada. Buen guión, buenas actuaciones.. No digna de cannes ni nada, pero entretenida. El twist final es cuento aparte.
En cine, Sky High está buena para verla con los hijos. Chicken Little, insufrible; Harry Potter, la mejor de la serie... y le tengo echado el ojo a Emily Rose`s... pero desde que supe que está basada en un caso real -y la guata de mi señora no da para emociones- me da chusto ir solo (play al video de Bombalet: ¡MAMON!).
De los coming atractions, el Código Da Vinci y su lejana fecha (Mayo 2006), que no impidió que ya sacaran el trailer, se ve tan entretenida como el libro. Igual que Narnia, que tiene el mejor trailer que he visto en mi vida (la gente de Copesa, porfaaa, muévanse con las entradas para la próxima semanaaaa)...
Sigo. Xmen 3 se ve como un comic de Alex Ross a 24 cuadros per sec (Justice League? Mmmm interesante idea). Pero Final Destination 3... Mmmno sé si da para otra entrega, aunque la 2 está buenísima.
En fin. Como siempre, hay para todos los gustos en esta temporada. Una buena idea para capear el calor, sin tener que quedar con los ojos rojos y pasado a cloro.

13.12.05

motion blur

Esta semana mi agenda y mi cabeza están llenas.
Colapsadas, más bien. La organización de la fiesta de la semana pasada me dejó con inmunidad diplomática hasta ayer, pero los fantasmas de los timings ya están empezando a penarme. Y mal.
Así que hoy figuraba en mi escritorio –Soundtrack del día: DJ Food y su ultra-hip disco nuevo “Refried Food”- trabajando 2 campañas al unísono e intentando correrme de la mayor cantidad de reuniones posibles.
A las 14.30, lunch con el grupo en la Piccola (nuestra teoría es que con lo que pasó en la sucursal de Vitacura, con 8 intoxicados, hacen justamente este día el mejor de todos para ir, porque va a estar todo absolutamente perfecto, con el local medio vacío y las pastas recién hechas).
Y Woosh!!, vuelta a mi mac.
A las 17.30, un ineludible meeting en el Hyatt con la gente de Mega, Cecilia Bolocco y el staff de Juanes por lo de mañana. Brisa, vista a la piscina, una Perrier con trufillas… Y zoom, volar nuevamente a la oficina luego del entremes glamoriento para seguir con una campaña que se me viene encima. Porque mañana es la fiesta de los niños en Mampato y me desconecto medio día.
Desconexión; bien para mi y mis neuronas. Menos tiempo; mal para mi y mis neuronas.
Uf... Y el jueves. Jueves, 21 horas Concierto de Juanes. Si no fuera mandatory lo disfrutaría más, pero voy con la Pepa (mi hermana) y mi dupla H, así que va a estar bueno. I hope.
Pero eso no quita que es musho para un martes, ¿no?...
No.

Fiesta


Una de las ridiculeces varias de la fiesta. Con peluca colorina hubiera quedado más realista, no??.. En fin.

12.12.05

Big ad party!

Todo lo que les pueda decir me queda corto. Si no estuvieron ahí, sólo podrán hacerse una mínima idea. Porque “Superhéroes & Villanos” fue LA fiesta del año. Absolut success!!... Con decirles que hasta el más perno de la agencia –cuya identidad me reservo- se quedó hasta las 5.30 am, como casi todo el mundo. Y eso es harto decir.
El comienzo estuvo medio flojo. Hubo clientes que pese a todo pidieron pegas urgentes para hoy, así que recién a las 11 pm terminamos el cóctel (brochetitas de pollo thai, ceviche con jengibre, vodka con cranberries y música de superhéroes de fondo), dando paso a la comida. Mientras, la Fran Larraín nos cantó en el escenario sacando aplausos. De ahí, mariposas en la guata cuando me fui a cambiar mientras la pantalla gigante mostraba el video 1. Las risas y los aplausos me relajaron… así que cuando hicimos el show pre-animación (con mi boss, el que siempre anima, diciendo en off que nica salía, que no quería seguir animando, y todo el comité gritando “¡¡OH, Y AHORA QUIEN PODRÁ ANIMAR?!!), salí al escenario empiladísimo.
De ahí en adelante, pure pleasure seeker. Y el hecho de que yo haya sido de los organizadores y el animador, y conociera al tipo de las luces –que fue ex dupla mía, plop- y al dj y al de las fotos y a los barman… simplemente convirtió la fiesta en LA MEJOR FIESTA en la que he estado en mucho tiempo. La música a mi pinta; la comida a mi pinta. Pole position en la barra en cualquier momento (era cosa de levantar la mano y un cubalibre aparecía por arte de magia)… Y como soy malito para figurar, me sentí a mis anchas animando, improvisando tallas y mostrando los videos y premiaciones que preparamos a costa de exceso de trasnoches, comida a domicilio y ojeras. Inventamos concursos, entregamos premios, bailamos hasta que cerramos…
Y me acosté –con pajaritos de fondo- pensando que, si esta fue la fiesta para inaugurar el 2006… Uf. Este año del perro se viene increíble.

6.12.05

Final Cut

Hoy es la recta final. El último esfuerzo del comité de la fiesta (que en resumidas cuentas somos H, yo y un par más). El estertor final de las ojeras y los “buenas noches, amor” por teléfono. Mañana a las 20.00 vamos a ver si todas las trasnochadas, pepsilights, almuerzos de reunión con sabor a cesar salad y horas de edición, valieron la pena.
Por mientras, en mi escritorio, tengo mis anteojos de sol como tatuados. Anoche me acosté tipo 4.00 (me dormí a las 4.30 porque la Perridícula insistía en tirarme su pelota para jugar) y hoy vi como en blur de movimiento a una señora embarazada y su hijo colorín diciéndome buenosdíasquetevayabien. Uf. Martes sabor jueves; ya estoy agotado… pero espérense nomás. Todavía me queda la parte más fuerte: animar. No les voy a contar más porque todo es sorpresa, of course. Pero el viernes o sábado les posteo un collage de las fotos para que se rían de mi.
Perdón... para que se rían conmigo.
Me acuerdo de mi matrimonio, que me tocó armarlo prácticamente solo. Esta vez tengo ayuda, pero el sentimiento es el mismo. Dulce agotamiento. Una fiesta hecha a tu pinta, que -oh, ironía- te servirá de catarsis al stress que la misma fiesta te causó. Una fiesta para casi 200 personas. Y locación, DJ, banquetera, videos, premios, votaciones, diseño de los disfraces, ¡¡animación!!…
Como si con mi vida de papá-marido-pendex-publicista no me bastara.

Ya.
Bueno. No.
No me basta.
Pero eso es lo entretenido, ¿no?

5.12.05

Post minimal

Minimal como mi tiempo en estos días.
Primero que todo, gracias a los se acordaron que el 02.12 es mi cumple y me cantaron el cumpleaños feliz (conté 5 veces en todo el día: al desayuno, en Ciudad Empresarial, en Cine3, en el Creppes & Waffles y nuevamente en mi depto), lo que hace un total de 15 deseos. Not bad.
Dos. Un matrimonio con señora embarazada puede ser muy bonito de comienzo (no puedo creer lo bonita que se veía la Romi arreglada para matrimonio con su guata ochomesina)... pero muy aburrido de final. Como no puede bailar -y a mi me da lata bailar si no es con ella- terminé mirando el techo y tomandome un Bailey`s XXXL que el chiflado del mozo me dio en vaso largo. Uf.
Tres: No hay nada mejor que pasar un domingo en la tarde comiendo cochinadas en el BK con tu hijo, luego ir al cine y acurrucarse con él viendo una película tan pendex como los dos: Sky High, Escuela de Superhéroes. Altamente recomendable para los inmaduros de corazón.
Y... Cuatro. El sushi mata el stress. Hoy lo corroboré.
Amen. Japiguik.

2.12.05

Celebration

Mi primer día de 29 años partió a las 12.01am con un abrazo con guata (de embarazo, la mía no me saludó), abriendo el regalo de la mia signora:
¡¡un juego Monopoly edición Los Simpson, wuhuuuu!!!
Así que me dormí recién a la 1.30 luego de reirme con los cambios: tarjetas de propiedad del Wiki-mart, el jefe Gorgory diciendo “a la carcel” y las fichas dibujadas.
A las 9.00am, con el despertador de soundtrack,  la perridícula no entendía nada: ella intentando saludarme con su cola y sus languetazos como siempre, mientras Sebastián le impedía el paso cantando a toda boca el japiberdei; la Romi con una torta de trufas frente a mi y dos regalos más: una loción aromática relajante  y un aceite para masajes.
Mmmm eso es como para después del embarazo, yo creo.
Luego, a las 9.30, la Fran llega a la productora con un muffin y me canta con mi boss el cumpleaños feliz (3 deseos, apaga el Zipo!)... Y más tarde, la productora se produce (nótese el juego de palabras) y me sorprenden con una torta con velas y todos.
(¡¡Gracias, Fer!!)
El día está recién partiendo y ya he comido torta 3 veces.
Así da gusto empezar mi último año de ventitantos.

Celebration

Mi primer día de 29 años partió a las 12.01am con un abrazo con guata (de embarazo, la mía no me saludó), abriendo el regalo de la mia signora:
¡¡un juego Monopoly edición Los Simpson, wuhuuuu!!!
Así que me dormí recién a la 1.30 luego de reirme con los cambios: tarjetas de propiedad del Wiki-mart, el jefe Gorgory diciendo “a la carcel” y las fichas dibujadas.
A las 9.00am, con el despertador de soundtrack, la perridícula no entendía nada: ella intentando saludarme con su cola y sus languetazos como siempre, mientras Sebastián le impedía el paso cantando a toda boca el japiberdei; la Romi con una torta de trufas frente a mi y dos regalos más: una loción aromática relajante y un aceite para masajes.
Mmmm eso es como para después del embarazo, yo creo.
Luego, a las 9.30, la Fran llega a la productora con un muffin y me canta con mi boss el cumpleaños feliz (3 deseos, apaga el Zipo!)... Y más tarde, la productora se produce (nótese el juego de palabras) y me sorprenden con una torta con velas y todos.
(¡¡Gracias, Fer!!)
El día está recién partiendo y ya he comido torta 3 veces.
Así da gusto empezar mi último año de ventitantos.