Permítanme el cliché de la rememoranza anual, aprovechando de que
ultimamente mi máximo "posteo" son dos lineas y un link que encontré en
alguna parte. Curando contenido más que haciéndolo -a menos que estemos
hablando de campañas y revisiones, que ahí es totalmente distinto.
empezar.... Así que valga la costumbre de recordar el año que se está
esfumando. Para mi, un año extraño. Accidentado -mi choque en moto y el accidente
cardiovascular de mi suegra-. Un año menos bling bling pero más pesado y
arduo que otros, en la pega. Con un foco quizás demasiado fuerte en redes
sociales, pero con satisfacciones y premios igual: desde el grand Prix en
los FIP hasta los Effies y Oros en los Amauta y los Big!.
Fue un año de viajes entretenidos (Sao Paulo, New York, La Paz y dos veces a
Lima), de cambios -desde el espacio físico en la oficina hasta gente nueva,
cuentas nuevas y responsabilidades nuevas... Pero si tengo que darle una
sola palabra al 2011, le pongo "aprendizaje".
Aprendí a pararme frente a una clase en vez de una audiencia.
Aprendí que uno siempre, siempre, cosecha lo que siembra. Aunque demore.
Y sobre todo, aprendí que somos una molécula mínima en un universo enorme,
así que más nos vale disfrutar, aprender y amar por nuestra cuenta, que
nadie lo hará por nosotros. Feliz 2012, gente. No creo que el mundo se acabe, pero sí creo que se va a
pegar una tremenda transformada. Y en eso, quizás los Mayas estaban
totalmente en lo cierto. Este mundo, como lo conocemos, sí se acaba el 2012.
Posted via email from Ritalin.