12.7.20
RitalinLeon.com
Con toda la locura de mi cambio de casa a Wordpress, luego mi cambio de pega a RTLN, mi consultora, olvidé por completo mi primera y más importante casa. Mi blog de toda la vida. Así que si lees esto, pásate a mi nuevo hogar digital, mi blog y sitio Ritalinleon.com, donde podrás seguir mi compañía, mi Podcast y mi ecosistema completo.
Nos vemos!
19.8.19
La interfaz del futuro?
Ultimamente estoy pegadísimo con mi Google Home. Un aparatito mínimo que reemplazo a Siri en mi pieza, básicamente por 3 cosas impresionantes:
- Que reconoce las voces; y se comporta de acuerdo a las cuentas de cada uno. No es lo mismo que yo le diga "Ok Google, qué tengo hoy", a que lo haga la waif. Aunque, claro, la waif es tecnófoba y no lo hace. Pero ya salvé mi algoritmo de Spotify cuando ella pidió Marc Anthiony (el horror) y no usó mi cuenta. Instant win.
- Que al conectarlo con el Chromecast (ese pendrive que se conecta a tu tele), se crea un ecosistema tele+parlante+usuario digno de ciencia ficción. Estilo: "Ok Google, ver Black Mirror, sin subtítulos", y que, en cámara lenta y con boca abierta, veas como a) se prende la tele b) se abre Netflix c) se abre TU usuario d) se pone el capitulo DE TU USUARIO, donde lo dejaste.
- Que es lejos más inteligente, y entiende, lejos, mejor que Siri. El "Ok google buenos días", completamente programable con las luces, tu calendario, waze, noticias… es como para pasar todo el día con la mantita hasta el cuello.
Los que me conocen, saben que soy un fan de la voz como interfaz. Desde mi primer iPhone con Siri hasta mi Apple Watch (QEPD)… Pero últimamente esa interfaz está tan sofisticada, que huele a futuro cercano que tu famoso trabajo de SEO (o el trabajo de las compañías para que la misma programación de su sitio esté tan bien diseñada para los ojos de Google, que sí o sí aparezcas naturalmente en la primera página, porque NADIE ve la segunda)… se termine con un holocausto vocal: y es que, con la voz, no tienes ni siquiera una primera página. Tienes sólo una, ¡una! Primera búsqueda.
"Quiero una pizza", "llévame a una bomba de bencina"…
Ayer empecé a ver "Mejor que Nosotros"; una serie de SCI-FI rusa (what?) de Netflix. Y como con HER, estoy rayando con las interfaces. Con esa mirada de un mundo con tanta tecnología, que se vuelve una capa invisible. Con Siris y Alexas invisibles, y pantallas estilo papel que apenas y usas.
Porque para qué, google. Para qué.
14.11.18
Tu cara, es tu cara?
Hoy apareció una noticia de la que todos mis amigos
- Que la policía por default debería tener un registro global. Eso de "todos tenemos derecho a pasar desapercibido" es super valido, hasta que al lado tuyo anda un pedófilo que se quiere colar al jardín de tu hijo. Si no tienes nada que ocultar, qué te importa que el gobierno tenga tu cara. Si eso termina funcionando para que me saquen un parte automatizado, el pelotudo soy yo.
- Que, como bien dictará la ley en trámite, todos tenemos derecho a decidir qué información se le da a quién. Es muy distinto que al entrar a la clínica rápidamente me hagan un check-in, y pase y todo está listo... a que saquen a alguien de un banco porque se filtró su información de salud y no les conviene. Vi una charla en el SXSW super interesante sobre el "Blockchain of Everything", y tu derecho inalienable -ahí si estamos de acuerdo- de ser tú quien decide qué información le das a quien... pero que la llave de entrada sea tu cara? ¡la raja!
- Como publicista, y comunicador en general, soy un obsesivo con la experiencia de usuario. Y si hay algo más perfecto y seamless que mirar un punto y que te reconozcan, díganselo a Amazon Go para que mejore aún más esto:
¿Somos los dueños de nuestro rostro? Obvio. De la información que conlleva? Sí, hasta cierto punto. No quiero que sepas donde vivo ni cómo se llaman mis hijos. Pero sí quiero que mi banco me dé un café gratis y que el aeropuerto me deje entrar corriendo hasta mi asiento del avión para enchufarme a mi serie... que mi asiento del avión sabe exactamente en qué punto la dejé, porque me está mirando. Pero con respeto.
31.10.18
Y a mi qué
Trend topic 2 días. "La mejor publicidad de la vida" (what?!!). Matinales. Programas de capuchas. Notas en todos los diarios... Y cuando respondes el "Y a mi qué", las plataformas son lo de menos. Si haces un comercial de TV que la gente comenta, va a aparecer en Twitter y la gente va a compartirla en su muro. Y si es una campaña digital digna de comentar, las noticias la van a subir al "offline". Olvídate de las plataformas. Tú quédate con el "¿Y a mi qué?".
Publicado primero en ritalinleon.com
16.10.18
Oye Siri... dame con Google Assistant?
- Si bien existen otros computadores como el HP Spectre o incluso el nuevo Microsoft Surface 6 que le hacen mucha pelea al Mac... todos usan Windows. El Mac usa Mac OS.
- No existe otro tablet como el iPad. Sorry. Convénzanme de lo contrario. Mándenme uno. No lo creo. iOS en parte. Apple en parte. No lo hay. Lo siento.
- Los AirPods son una maravilla. Livianos, pequeños, se cargan en su caja, reconocen el Apple Watch, el Mac, el iPhone y el Apple TV.
- Tampoco existe en otro ecosistema un Smart Watch como el Apple Watch. Y nótese que yo todavía tengo y uso el primero.
12.10.18
El VERDADERO Diseño de Experiencias
Una marca. Una mirada. Un foco. No importa el medio, no importa el formato. Eso, es diseño de experiencia.
Seamless. En inglés. Sin costuras. Perfecto. Liso como espejo de agua. Que la forma en como te recibe el vendedor, se condiga con la vitrina. Y la filosofía interna. Y el empaque. Y el discurso de la fiesta de fin de año de la empresa.
Pero diseñar una experiencia de marca no es fácil. Es ir contra la corriente del status quo y la mediocridad. Del "para qué cambiarlo si funciona". Es sistémico. Es profundo. Y requiere un diseño proactivo, consciente.
Es la mentalidad del nuevo coach que llega al equipo de futbol. O del nuevo gerente de marketing. Y no requiere que estés llegando. La mentalidad de "esto se va a ordenar de una puta vez" puede partir hoy mismo. Pero tiene que tener una mirada obsesiva con que, finalmente, todo (¡todo!) comunica. Desde cuánto le pagas a tus empleados y si reciclas o no, hasta el texto legal de tu aviso.
Diseñar o rediseñar la la experiencia de tu marca es un Sudoku. Una partida de ajedrez. Caminar en el hielo. Dar pasos específicos, conscientes. Inhalar y exhalar a conciencia. No importa si antes caminabas sin pensar. Desde ahora, al menos hasta que esa cadencia se vuelva la que quieres realmente tener, debe ser obsesivamente consciente.
De muestra, un botonazo que me encontré en Linkedin: